Internacionalización: fase de análisis

En una entrada anterior hablamos sobre las oportunidades que nos da internacionalizar nuestra empresa, en esta ocasión daremos algunas recomendaciones para la fase de análisis, que se lleva a cabo a partir de la concepción y aceptación de la idea. Hay que resaltar que el proceso de internacionalización de empresas es largo y lleva una serie de fases que vale la pena tomar sin pausa pero sin prisa para aumentar nuestras posibilidades de triunfo en este nuevo reto corporativo.

Lo primero es crear un departamento de gestión internacional, encargado de todo lo referente a la apertura a mercados exteriores. Tener personal enfocado en esto nos permitirá, por una parte, contar con especialistas en el tema y, por otra, considerar todas las implicaciones, si este trabajo se deja a personal de otros departamentos el margen de error por pasar por alto detalles puede ser muy alto.

En conjunto con el departamento de gestión internacional, los responsables de las áreas deben trabajar sobre un análisis interno de la compañía. Si bien una auditoría externa es recomendable, no es necesaria en tanto que no estamos cediendo la administración, en necesidad de probar bienes o ejerciendo un trámite similar, pero conocer la situación en que estamos como organización definitivamente nos dará las herramientas para plantear objetivos y estrategias a seguir para mejorar. Un análisis FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) nos ayudará a entender clara y objetivamente cómo nos estamos comportando y qué podemos afianzar o cambiar para mejorar. Asimismo, nos ayudará a demarcar los objetivos que perseguimos no necesariamente como empresa en general (que esos ya deben estar establecidos y nos guiamos por ellos), pero sí en específico con la internacionalización. ¿Qué buscamos conseguir? Esta será la pregunta clave para determinar las estrategias a seguir y para tomar decisiones que se ajusten mejor a nuestras metas.

El análisis sería incompleto sin evaluar la situación financiera de la empresa. Debemos verificar que la compañía tiene solvencia en la actualidad y qué tanto margen existe para invertir con el riesgo que ello implica. No hay una cifra determinada para internacionalizarse, pero sí debemos entender nuestra situación financiera para desarrollar estrategias a seguir en aras de la solvencia necesaria.

Para conocer más sobre este interesante y amplio proceso te invitamos a la Maestría en Gestión Ejecutiva Internacional que ofrece la Universidad Iberoamericana Tijuana.

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