Poder hispano en las economías globales
Este mes de octubre es el mes de la Hispanidad. En México las mayores reivindicaciones que tenemos en relación con esta conmemoración están en Estados Unidos, lo que no quiere decir que España, por ejemplo y de manera obvia, no celebre encarecidamente su riqueza cultural, su lengua y todos sus elementos culturales. Pero llama la atención que Estados Unidos se vea en un momento histórico de atención primordial a este tipo de reconocimientos. En Houston, más del 38 % de la población es de origen hispano, así que la celebración fue en grande, con conciertos, exposiciones, obras de teatro, festivales gastronómicos, entre otros.
Por ejemplo, el artista plástico Guadalupe Hernández presentó Recuerdos de Juventud, usando fotografías tomadas en visitas a México para reinterpretar sus recuerdos de infancia para celebrar su identidad cultural como ciudadano de ambos países. También, como las celebraciones comenzaron desde el 15 de septiembre, se llevó a cabo una ceremonia del Grito de Independencia. Son Rompe Pera tuvo diferentes presentaciones y alegró con su cumbia. También estuvo la DJ Mexican Blackbird, Vanessa Alonzo acompañada por mariachi, bailarines brasileños y argentinos, entre muchos otros.
Vale la pena mencionar que el español (castellano y sus variantes por país hispanohablante) es la segunda lengua más hablada del mundo, con aproximadamente 460 millones de hablantes nativos. Además, tiene gran potencial en el contexto del comercio internacional.
Latinoamérica tiene muchas oportunidades de tomar su poder como productores, comercializadores e incluso clientes clave; es decir, saltar de su postura de territorio saqueado (que no podemos ignorar esa parte histórica en el marco de la conmemoración de la hispanidad) y con ello tener herramientas para exigir espacios y condiciones favorables para el mercado y su territorio. Desde el idioma, la identidad, el talento, los productos culturales que tanto se explotan por otros pueden llegar a ser herramientas importantes de posicionarnos en el mercado desde una postura protagónica.
Por supuesto, frente a esto, la pregunta es cómo llegar a tomar el poder de nuestros recursos sin explotarlos o convertirlos por propia mano en nuestra única moneda de cambio, sino lograr que converjan y generen un valor agregado en comercio internacional e intercambio con diversos países. ¿Te interesa participar de esta conversación? Forma parte de la Maestría en Gestión Ejecutiva Internacional de la Universidad Iberoamericana Tijuana. Te esperamos.