Reducir el estrés laboral: tarea de todos
En una entrega anterior, comentamos sobre la importancia de la desconexión laboral para prevenir y combatir el burn out entre nuestros colaboradores (y nosotros mismos), y es que de acuerdo con la investigadora Erika Villavicencio-Ayub, al menos el 35 % de los mexicanos de entre 29 y 45 años de edad se consideran adictos al trabajo. La cuestión es que nunca podemos separarnos de él pues tenemos a la mano (y constantemente en nuestra mano, hay que decirlo) dispositivos móviles donde se nos puede encontrar para temas laborales como correo electrónico y WhatsApp, entre otras.
Ahora bien, si bien la desconexión laboral es fundamental y habla de la voluntad por dejar bien establecidos los límites entre la vida personal y el empleo, dentro de nuestras oficinas podemos hacer mucho más por reducir el estrés laboral, considerando que antes que todo, nuestros colaboradores son personas. El estrés afecta la productividad de cualquiera y aumenta los niveles de irritabilidad, ¿realmente queremos eso, por ejemplo, en alguien que se encargue de un área de atención al cliente?
Hay pequeñas acciones que no sólo sirven en la oficina, sino que ayudan a generar un cambio de hábitos hacia una vida más saludable para el cuerpo y la mente. Por ejemplo, ofrecer opciones de comida saludable en lugar de comida chatarra; o dar espacio y fomentar que cada uno se mueva unos minutos cada hora, ya sea caminando un poco o haciendo estiramientos (el cuerpo y la mente entumecidos son menos capaces que cuando están estimulados).
Otra recomendación importante es no estar peleados con la comodidad de nuestros colaboradores. Cambiar el mobiliario a uno más cómodo y hacer del espacio de trabajo un espacio atractivo puede tener grandes resultados, más aún si en esas renovaciones se toma en consideración la opinión de los empleados. También en relación con la comunidad, dejemos de una vez por todas la idea de que todas las personas trabajamos igual. Hay quienes necesitan música para concentrarse, a quienes les funciona estar de pie, quienes llegan a poner alguna serie o podcast para escuchar. Mientras no afecte a otros colaboradores, permitir demostrar que esos actos no afectan su desempeño, sino que aumenta su productividad debería ser una opción para cualquiera.
Muestra a tu equipo que confías en ellos y su capacidad, y confía en tu criterio, eso elevará la moral y reducirá tensiones. Si te interesa aprender a generar ambientes laborales sanos y productivos te invitamos a conocer la Maestría en Desarrollo Organizacional que la Universidad Iberoamericana Tijuana tiene para ti.