Samba, dragón y tango
Alrededor de los años noventa se manifestó un efecto financiero mundial que afectó la economía de diversos países, que se denominó Efecto Dominó, ya que los sistemas financieros estaban -como en el presente- profundamente relacionados así que, al afectarse o beneficiarse uno, impacta a los demás. En esta década el mundo experimentó una crisis financiera muy precipitada que afectó principalmente a Japón, México, Asia, Rusia, Brasil y Argentina.
Efecto Dragón
Se refiere a la crisis que enfrentó Japón en 1995 con el desplome de las exportaciones en el mismo continente asiático, el colapso de la rentabilidad empresarial y la deuda externa. Esta fue solo una de las consecuencias que experimentó Asia, donde Japón experimentó la devaluación de su divisa y la reducción de la cuenta que manejaba con Hong Kong.
Efecto Vodka
En 1998, Rusia enfrentó una crisis financiera que fue potenciada por la crisis asiática que comenzó en 1997, afectando directamente la exportación de materias primas como petróleo, el gas natural, los metales y la madera conformaban más del 80% de las exportaciones rusas, dejando al país vulnerable a las oscilaciones de los precios mundiales. El petróleo era, además, el recurso que mayores ingresos fiscales generaba al gobierno ruso[1], siendo lo que más lo afectó durante esta crisis. Así como el yen japonés, el rublo ruso también sufrió devaluación y un aumento en su deuda externa como los otros países que se vieron perjudicados por el efecto dominó.
Efecto Tequila
Se refiere al daño colateral del efecto dominó en México en 1994, siendo esa su primera crisis debido a su participación en El Tratado de Libre Comercio, en un mundo donde las divisas internacionales se devaluaban con velocidad. Así como otros países, su deuda externa también aumentó considerablemente. Esta crisis también se conoció como el “Error de Diciembre”, ya que durante los gobiernos de Zedillo y Salinas de Gortari se alcanzaron niveles alarmantes de devaluación del peso, incrementando el valor del dólar un 300%. Este efecto perjudicó profundamente a Argentina, que fue parte del efecto Tango.
Efecto Samba
Este se desenvolvió en 1999 en Brasil al ser socio comercial de Rusia, ya que al verse afectada Rusia, este país se vio involucrado en los mismos problemas internacionales de la devaluación de la moneda, incrementos inflados de tasas de interés y el aumento de la deuda externa.
Efecto Tango
En el 2014 se desplomó el mercado argentino, enfrentando una devaluación del 17% del peso argentino con la caída de sus acciones, lo cual golpeó con el efecto dominó a India, Turquía y Rusia por ser socios comerciales de Argentina. Durante este periodo, Argentina se declaró incapaz de cumplir con los pagos de deuda externa que tenía.
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[1] https://www.itson.mx/publicaciones/pacioli/Documents/no66/21-crisis_economicas_mundiales_el_efecto_domino.pdf
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